Los edificios antiguos son muy propensos a sufrir problemas de humedad que pueden afectar de forma significativa a su estructura. La humedad aparece de diversas formas, existen muchos tipos, y uno de los más comunes es la humedad por capilaridad. Como especialistas en eliminar humedad por capilaridad, creemos que es importante saber que, en caso de encontrar un problema de humedad en el hogar, es fundamental descubrir cuál es el origen para dar con la solución más adecuada. Aquapol, por ejemplo, es un sistema antihumedad enfocado principalmente a los problemas de humedad por capilaridad tan habituales en edificaciones históricas y casas antiguas.
Es fundamental ante este tipo de situaciones tratar de buscar una solución definitiva en lugar de tapar el problema, puesto que es muy fácil que vuelva a aparecer.
¿Sufre tu edificio antiguo problemas de humedad por capilaridad?
Como comentamos, las humedades aparecen con facilidad en los edificios antiguos. ¿A qué se debe esto? Para entenderlo hay que tener en cuenta, que para prevenir la aparición de humedad por capilaridad es necesario poner soluciones desde el momento mismo de la construcción del inmueble. Hoy en día existen opciones antihumedad para las estructuras, así como impermeabilizaciones, que hace unos años no había. Por eso, los edificios antiguos no están protegidos adecuadamente para evitar la aparición de humedades.
En concreto, la humedad por capilaridad se origina en la absorción de agua que se da al haber contacto entre el terreno y la zona inferior de los muros del edificio. Se trata de un tipo de humedad que aparece siempre en la parte baja de los muros, tabiques de los sótanos o la planta baja de un inmueble, cerca del terreno o en un lugar donde hay agua. Por eso, prevenir su aparición desde la ejecución de la obra instalando las barreras necesarias en el apoyo de los muros es fundamental. Como en los edificios antiguos esto no es posible, lo que se hace es actuar sobre la propia humedad.
Detectar un problema de humedad por capilaridad es el primer paso para tratarlo. Para ello, es necesario fijarse en algunos detalles, como la aparición de manchas en la pared a una altura más bien baja; la aparición de moho y salitre en las paredes; caída de revestimientos, rodapiés y pintura; sensación de humedad y frío en las estancias, etc.
El siguiente paso sería el de contactar con profesionales para realizar un diagnóstico para ver ante qué tipo de humedad nos encontramos, cuál es su origen, y si es posible tratarlo con un sistema efectivo como Aquapol, especialmente dirigido a eliminar la humedad por capilaridad.
Se trata de un dispositivo que se instala de forma sencilla y sin necesidad de obra, que es respetuoso con el entorno y ofrece todas las garantías de seguridad y calidad. ¿Tienes un problema de humedad por capilaridad en tu edificio? ¡Ponte en contacto con nosotros!