En el casco antiguo de Bari se levanta la basílica que alberga las reliquias de San Nicolás. El edificio es de estilo románico y se construyó, en parte, con la reutilización de materiales de construcciones anteriores.
La Basílica de San Nicolás está al lado del mar, toda la construcción y su cripta fueron atacados por la humedad ascendente, con un nivel de más de 2 m sobre el nivel del suelo. En julio de 2011 se inició el proceso de deshumidificación con la instalación del sistema Aquapol.
Para los curiosos que visiten este monumento, encontraran el dispositivo instalado en el púlpito de madera del siglo XVII.
En sucesivos seguimientos como el del 23 de noviembre de 2011, se tomaron nuevas medidas de humedad que verificaron su progresivo descenso y el perfecto funcionamiento del aparato.